“Si te preguntas qué es esto de delegar en otro profesional, la asistencia virtual es un servicio digital sin límite geográfico prestado que no engorda, agita y hace felices a negocios. Es una profesión que ayuda a profesionales independientes que tengan marca propia o comercios offline y comprende desde la delegación de tareas respecto a la gestión interna de la empresa como por ejemplo: atención al cliente, automatizaciones, lanzamientos con acompañamiento, facturación… hasta delegar parte de la imagen corporativa de un negocio en otro profesional, en este caso en un asistente virtual.
Así que quédate con este dato y es que la asistencia virtual es básicamente, la delegación de tareas de un profesional en otro con el objetivo del propio descanso mental para uno mismo y crecimiento de negocios”.
Cierto es, que no todas las asistentes virtuales desempeñan las mismas competencias. Todo depende de la formación y especialización en la que una haya decidido emprender. Depende de cada profesional, la figura del asistente virtual se dirige a un cliente ideal u otro.
En este caso, yo, me dirijo al sector mentoring, coaching, periodístico, empresas que quieran comunicar y negocios locales que necesiten implementar diferentes departamentos.
En estos tiempos de transformación digital, contar con una figura soporte, es la mejor opción para aquel negocio que quiera digitalizarse o que ya lo esté y quiera crecer exponencialmente.
Un asistente virtual te apoya en tareas cotidianas e incluso, te puede facilitar una hoja de ruta a seguir para no andar como pollo sin cabeza para lograr que una sección de tu empresa funcione mejor.
<Un buen briefing antes de comenzar a trabajar con un cliente, aclara y asienta muchas ideas>
Para crecer hay que invertir por eso también es una profesión enfocada a la ayuda de CEO’s en la fase despegue de su propio negocio.
Desde mi experiencia, te aconsejo trabajar con un asistente virtual en el momento que ya empiezes a generar ingresos (no antes) porque es el momento de implementar procesos, departamentos de tu negocio, hacer equipo, lanzamientos, automatizaciones, funneles de ventas.. pero eso sí, no intentes hacerlo tu todo solo/a ya que la consecuencia será aún mayor. No solamente vas a tener un gran agotamiento por falta de apoyo y recursos sino que cuando te des cuenta, estarás completamente desenamorado/a de tu proyecto que tanto te hizo vibrar un día y tirarás la toalla abandonándolo.
Hay muchas maneras de encontrar a estos expertos, puedes buscar en directorios de otras empresas, páginas webs propias o incluso en RRSS mediante los famosos #.
El día a día de un asistente virtual es trabajar con sus clientes haciendo focus en aquella área de crecimiento, o bien llevando a cabo las tareas diarias para que el CEO se pueda dedicar a crear nuevos proyectos de expansión.
Pero…¿Cuánto cuesta trabajar con un A.V.? ya eso depende de cada profesional, de cómo estén estructurados y paquetizados los servicios. Puede ser por horas o por proyectos pero también depende mucho de lo que el CEO necesite en esos momentos.
Si tienes dudas en si trabajar con uno o no, y conoces a alguien pregunta sin compromiso y verás cómo todas esas barreras caen.
NO TE OLVIDES DE CREAR UN PLAN DE ACCIÓN PARA DEJAR DE PROCRASTINAR CON UN ASISTENTE VIRTUAL
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